viernes, 14 de diciembre de 2012

Poema de Pedro Bonifacio Palacios (Almafuerte)

¡Avanti!
Si te postran diez veces, te levantas
otras diez, otras cien, otras quinientas:
no han de ser tus caídas tan violentas
ni tampoco, por ley, han de ser tantas.

Con el hambre genial con que las plantas
asimilan el humus avarientas,
deglutiendo el rencor de las afrentas
se formaron los santos y las santas.

Obsecación asnal, para ser fuerte,
nada más necesita la criatura
y en cualquier infeliz se me figura
que se mellan los garfios de la suerte...

¡Todos los incurables tienen cura
cinco minutos antes de su muerte!

¡Più Avanti!

No te des por vencido, ni aún vencido,
no te sientas esclavo, ni aún esclavo;
trémulo de pavor, piénsate bravo,
y acomete feroz, ya mal herido.

Ten el tesón del clavo enmohecido
que ya viejo y ruin, vuelve a ser clavo,
no la cobarde estupidez del pavo
que amaina su plumaje al primer ruido.

Procede como Dios que nunca llora;
o como Lucifer, que nunca reza;
o como el robledal, cuya grandeza
necesita del agua y no la implora...

¡Que muerda y vocifere vengadora,
ya rodando en el polvo, tu cabeza!


¡Molto Più Avanti!

Los que viertan sus lágrimas amantes
sobre las penas que no son sus penas;
los que olvidan el son de sus cadenas
para limar las de los otros antes;

los que van por el mundo delirantes
repartiendo su amor a manos llenas,
caen, bajo el peso de sus obras buenas,
sucios, enfermos, trágicos, sobrantes.

¡Ah! Nunca quieras remediar entuertos;
nunca sigas impulsos compasivos;
ten los garfios del Odio siempre activos
y los ojos del juez siempre despiertos...

¡y al hecharte en la caja de los muertos,
menosprecia los llantos de los vivos!

¡Molto Più Avanti Ancora!

Esta vida mendaz es un estrado
donde todo es estólido y fingido,
donde cada anfitrión guarda escondido
su verdadero ser tras el tocado:

No digas tu verdad ni al más amado,
no demuestres temor ni al más temido,
no creas que jamás te hayan querido
por más besos de amor que te hayan dado.

Mira cómo la nieve se deslíe
sin una queja de su labio yerto,
cómo ansía las nubes el desierto
sin que a ninguno su ansiedad confíe:

Maldice de los hombres, pero ríe;
vive la vida plena, pero muerto.

Moltíssimo Più Avanti Ancora!

Si en vez de las estúpidas panteras
y los férreos, estúpidos leones,
encerrasen dos flacos mocetones
en la frágil cárcel de las fieras:

No habrían de yacer noches enteras
en el blando pajar de sus colchones,
sin esperanzas ya, sin reacciones,
lo mismo que dos plácidos horteras;

Cual Napoleones pensativos, graves,
no como el tigre sanguinario y maula,
escrutarían palmo a palmo su aula,
buscando las rendijas, no las llaves...

¡Seas el que tú seas, ya lo sabes:
a escrutar las rendijas de tu jaula!

lunes, 22 de octubre de 2012



Silverio Giménez. Papito! ya son 22 años sin verte, y hace que uno se acostumbre, y no quiero eso. Hoy le pido a Dios dos cosas: que te cuide mucho donde estas, y que no me permita acostumbrarme a que no estés, que no te olvide... por favor.
Quiero recordar hasta el último momento de mi vida, todas las cosas buenas y malas que vivimos,  porque si bien vos vivis en cada uno de tus hijos, porque cada uno tenemos algo de vos, fuiste una persona irrepetible, y a pesar de que tu recuerdo se idealiza cada año y a pesar de pecar de pecar de subjetivo, fuiste para mi una de las mejores personas que he conocido.
Hoy una vez mas prendo una vela en tu nombre y mi permanente recuerdo.

lunes, 4 de junio de 2012

Me declaro vivo...

ME DECLARO VIVO


Saboreo cada acto.

Antes cuidaba que los demás no hablaran mal de mí,
entonces me portaba como los demás querían
y mi conciencia me censuraba.

Menos mal que a pesar de mi esforzada
buena educación siempre había alguien difamándome.
¡Cuánto agradezco a esa gente que me enseñó
que la vida no es un escenario!
Desde entonces me atreví a ser como soy.

He viajado por todo el mundo, tengo amigos de todas las religiones;
conozco gente extraña:
católicos, religiosos pecando y asistiendo a misa puntualmente,
pregonando lo que no son,
personas que devoran al prójimo con su lengua e intolerancia,
médicos que están peor que sus pacientes,
gente millonaria pero infeliz,
seres que se pasan el día quejándose,
que se reúnen con familia o amigos
los domingos para quejarse por turnos,
gente que ha hecho de la estupidez su manera de vivir.

El árbol anciano me enseñó
que todos somos lo mismo.

La montaña es mi punto de referencia:
ser invulnerable, que cada uno diga lo que quiera,
yo sigo caminando indetenible.

Soy guerrero:
mi espada es el amor,
mi escudo el humor,
mi hogar la coherencia,
mi texto la libertad.

Si mi felicidad resulta insoportable, discúlpenme,
no hice de la cordura mi opción.
Prefiero la imaginación a lo indio,
es decir inocencia incluida.

Quizás solamente teníamos que ser humanos.

El que tú no veas los átomos,
no significa que no existan.

Por eso es muy importante que sea el Amor
lo único que inspire tus actos.

Sin Amor nada tiene sentido, sin Amor estamos perdidos,
sin Amor corremos el riesgo de estar de nuevo
transitando de espaldas a la luz.

En realidad,
sólo hablo
para recordarte
la importancia
del silencio.

Anhelo que descubras el mensaje que se encuentra
detrás de las palabras; no soy un sabio,
sólo un enamorado de la vida.

El silencio es la clave,
la simplicidad es la puerta
que deja fuera a los imbéciles.

La gente feliz no es rentable,
con lucidez no hay necesidades innecesarias.

No es suficiente querer despertar, sino despertar.

La mejor forma de despertar es hacerlo
sin preocuparse porque nuestros actos
incomoden a quienes duermen al lado.

Recuerda que el deseo de hacerlo bien será una interferencia.
Es más importante amar lo que hacemos
y disfrutar de todo el trayecto.

La meta no existe, el camino y la meta son lo mismo.
No tenemos que correr hacia ninguna parte,
sólo saber dar cada paso plenamente.

No, no te resistas, ríndete a la vida.
Quien acepta lo que es
y se habilita para hacer lo que puede,
encarna las utopías
y lo imposible se pone a disposición.

La mejor manera de ser feliz es: ‘ser feliz’.
Reconstruye tu raíz y saborea la vida.

Somos como peces de mares profundos,
si salimos a la superficie reventamos.

La frivolidad y la intrascendencia
condenan la vida a la muerte.

Cuando somos más grandes que lo que hacemos,
nada puede desequilibrarnos.
Pero cuando permitimos que las cosas sean más grandes
que nosotros, nuestro desequilibrio está garantizado.

El corazón está en emergencia por falta de amor.
Hay que volver a conquistar la vida,
enamorarnos otra vez de ella.

Nuestro potencial interior aflora espontáneamente
cuando nos dejamos en paz.

Quizá sólo seamos agua fluyendo;
el camino nos lo tenemos que hacer nosotros.

Más no permitas que el cauce esclavice al río,
no sea que en vez de un camino tengas una cárcel.

La infelicidad no es un problema técnico,
es el resultado de haber tomado el camino equivocado.

Amo mi locura que me vacuna contra la estupidez.
Amo el amor que me inmuniza ante la infelicidad
que pulula por doquier, infectando almas
y atrofiando corazones.

El amor es, a nivel sutil,
la esencia de nuestra instancia inmunológica.

La gente está tan acostumbrada a complicarse,
que rechaza de antemano la simplicidad.

La gente está tan acostumbrada a ser infeliz,
que la sensación de felicidad
les resulta sospechosa.

La gente está tan reprimida, que la espontánea ternura
le incomoda y el amor le inspira desconfianza.

Hay cosas que son muy razonables, objetivas y… apestan.

Ya no podemos perder el tiempo
en seguir aprendiendo técnicas espirituales cuando aún estamos vacíos de amor.

Quienes no están preparados para escuchar
tienen la recompensa de no enterarse de nada.

Disfruta de lo que tienes, recibe lo que venga,
crea e inventa lo que necesites, haz sólo lo que puedas,
y fundamentalmente celebra lo que tengas.

La vida es un canto a la belleza,
una convocatoria a la transparencia

Cuando esto lo descubras desde la vivencia,
el viento volverá a ser tu amigo,
el árbol se tornará en maestro
y el amanecer en ritual.

La noche se vestirá de colores,
las estrellas hablarán el idioma del corazón
y el espíritu de la tierra reposará otra vez tranquilo.

¡Me declaro vivo!

Chamalú - Indio Quechua

viernes, 11 de mayo de 2012

EL AVE FENIX


EL AVE FENIX
En el jardín del Paraíso, bajo el árbol de la sabiduría, crecía un rosal. En su primera rosa nació un pájaro; su vuelo era como un rayo de luz, magníficos sus colores, arrobador su canto.
Pero cuando Eva cogió el fruto de la ciencia del bien y del mal, y cuando ella y Adán fueron arrojados del Paraíso, de la flamígera espada del ángel cayó una chispa en el nido del pájaro y le prendió fuego. El animalito murió abrasado, pero del rojo huevo salió volando otra ave, única y siempre la misma: el Ave Fénix. Cuenta la leyenda que anida en Arabia, y que cada cien años se da la muerte abrasándose en su propio nido; y que del rojo huevo sale una nueva ave Fénix, la única en el mundo.
El pájaro vuela en torno a nosotros, rauda como la luz, espléndida de colores, magnífica en su canto. Cuando la madre está sentada junto a la cuna del hijo, el ave se acerca a la almohada y, desplegando las alas, traza una aureola alrededor de la cabeza del niño. Vuela por el sobrio y humilde aposento, y hay resplandor de sol en él, y sobre la pobre cómoda exhalan, su perfume unas violetas.
Pero el Ave Fénix no es sólo el ave de Arabia; aletea también a los resplandores de la aurora boreal sobre las heladas llanuras de Laponia, y salta entre las flores amarillas durante el breve verano de Groenlandia. Bajo las rocas cupríferas de Falun, en las minas de carbón de Inglaterra, vuela como polilla espolvoreada sobre el devocionario en las manos del piadoso trabajador. En la hoja de loto se desliza por las aguas sagradas del Ganges, y los ojos de la doncella hindú se iluminan al verla.
¡Ave Fénix! ¿No la conoces? ¿El ave del Paraíso, el cisne santo de la canción? Iba en el carro de Thespis en forma de cuervo parlanchín, agitando las alas pintadas de negro; el arpa del cantor de Islandia era pulsada por el rojo pico sonoro del cisne; posada sobre el hombro de Shakespeare, adoptaba la figura del cuervo de Odin y le susurraba al oído: ¡Inmortalidad! Cuando la fiesta de los cantores, revoloteaba en la sala del concurso de la Wartburg.
¡Ave Fénix! ¿No la conoces? Te cantó la Marsellesa, y tú besaste la pluma que se desprendió de su ala; vino en todo el esplendor paradisíaco, y tú le volviste tal vez la espalda para contemplar el gorrión que tenía espuma dorada en las alas.
¡El Ave del Paraíso! Rejuvenecida cada siglo, nacida entre las llamas, entre las llamas muertas; tu imagen, enmarcada en oro, cuelga en las salas de los ricos; tú misma vuelas con frecuencia a la ventura, solitaria, hecha sólo leyenda: el Ave Fénix de Arabia.
En el jardín del Paraíso, cuando naciste en el seno de la primera rosa bajo el árbol de la sabiduría, Dios te besó y te dio tu nombre verdadero: ¡poesía!.
Hans Christian Andersen
El Ave Fénix

jueves, 10 de mayo de 2012

Un bello poema


CORAZÓN CORAZA

Porque te tengo y no
porque te pienso
porque la noche está de ojos abiertos
porque la noche pasa y digo amor
porque has venido a recoger tu imagen
y eres mejor que todas tus imágenes
porque eres linda desde el pie hasta el alma
porque eres buena desde el alma a mí
porque te escondes dulce en el orgullo
pequeña y dulce
corazón coraza
              
porque eres mía
porque no eres mía
porque te miro y muero
y peor que muero
si no te miro amor
si no te miro
              
porque tú siempre existes      dondequiera
pero existes mejor donde te quiero
porque tu boca es sangre
y tienes frío
tengo que amarte amor
tengo que amarte
aunque esta herida duela como dos
aunque te busque y no te encuentre
y aunque
la noche pase y yo te tenga
y no.

Mario Benedetti
Nacimiento:14 de Septiembre de 1920
Defunción:17 de Mayo de 2009

Poeta y novelista uruguayo nacido en 1920 en Paso de Los Toros.Recibió la formación primaria y secundaria en Montevideo y a los dieciocho años se trasladó a Buenos Aires donde residió por varios años. En 1945 formó parte del famoso semanario «Marcha» donde se formó como periodista, colaborando allí hasta 1974.Ocupó el cargo de director del Departamento de Literatura Hispanoamericana en la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Universidad de Montevideo. Desde 1983 se radicó en España donde permanece la mayor parte del año. Obtuvo el VIII Premio Reina Sofía de Poesía y recibió el título de Doctor Honoris Causa por la Universidad de Alicante.Su vasta producción literaria abarca todos los géneros, incluyendo famosas letras de canciones, cuentos y ensayos, traducidos en su mayoría a varios idiomas.De su extensa obra se encuentran entre otros, la novela «Gracias por el fuego», «El olvido está lleno de memoria», y los poemarios, «Inventario Uno» e «Inventario Dos»

viernes, 18 de marzo de 2011

Ojos claros, serenos,
si de un dulce mirar sois alabados,
¿por qué, si me miráis, miráis airados?
Si cuanto más piadosos,
más bellos parecéis a aquel que os mira,
no me miréis con ira,
porque no parezcáis menos hermosos.
¡Ay tormentos rabiosos!
Ojos claros, serenos,
ya que así me miráis, miradme al menos.
Gutierre de Cetina (1517-1557)

martes, 27 de octubre de 2009

Esto es un poema que me envió Raúl a mi correo, el 14 de abril del 2008, cuando yo estaba mal, por mi accidente.

Aquí le mando a koky un poema, que es uno que en circuntancias muy especiales uno no le busca lo jocoso de la vida, pero tampoco le encuentra fuerza a otro que a uno mismo.

Fuerza Hermano!. Se Llama Piú Avanti de Almafuerte.-

No te des por vencido, ni aún vencido, no te sientas esclavo, ni aún esclavo; trémulo de pavor, piénsate bravo, acomete feroz, ya mal herido.

Ten el tesón del clavo enmohecido que ya viejo y ruin, vuelve a ser clavo; no la cobarde estupidez del pavo que amaina su plumaje al primer ruido.

Procede como Dios que nunca llora; como Lucifer, que nunca reza; como el robledal, cuya grandeza necesita del agua y no la implora...

¡Que muerda y vocifere vengadora, a rodando en el polvo, tu cabeza! ¡Molto Piú Avanti! Los que viertan sus lágrimas amantes sobre las penas que no son sus penas; los que olvidan el son de sus cadenas para limar las de los otros antes; los que van por el mundo delirantes repartiendo su amor a manos llenas, caen, bajo el peso de sus obras buenas, sucios, enfermos, trágicos, sobrantes.

Ah! Nunca quieras remediar entuertos; nunca sigas impulsos compasivos; ten los garfios del Odio siempre activos los ojos del juez siempre despiertos . . .y al echarte en la caja de los muertos, menosprecia los llantos de los vivos!